ñañañ

ñañañ

jueves, 24 de abril de 2014

MM

te vi. cada vez que te veo no lo puedo creer. Mas cuando me agarras desprevenida.
es de verdad este lugar? es de verdad que estas ahi?
si fuesemos gatitos ya te hubiera lamido la carita,
total ellos no tienen pudor de ser dos completos desconocidos.

por lo menos cruzar las miradas me dejo todo el dia soñando.

martes, 22 de abril de 2014

Diciembre 2011

soñé que moría y fue mi ultimo una sonrisa

un dolor en el pecho se aliviaba

alrededor las cosas quedaban fuera de mis sentidos

unas manos tranquilas nos acariciaban





¿Qué parte de mí 

se fue para siempre?

sueño del 19/9/2013

Soñe que ahora la vida era arriba, en el cielo con maquinas voladoras. 
Estabamos en lo de lila y tocaban unas bandas en su casa, habia un fuego enorme. 
Teniamos una mision con los chicos, y era bajar a la tierra, a donde viviamos antes, y buscar los instrumentos que habian quedado. 
Nuestro auto era una chatarra muy veloz que volaba. 
Bajabamos, el piso ardia, el aire no se podia respirar, los cuerpos que habian quedado alli abajo nadie los venia a rescatar y caminaban como espiritus perdidos por la calle. Encontrabamos los instrumentos y nos ibamos. Estaba juli y se ponia a tocar canciones en la calle, ya estabamos arriba. Se ponia a tocar con una base electronica atras. Nosotras todas estabamos como en una calesita tiradas mirando el cielo, el cielo era muy raro, todo se movia muy extrañamente, casi artificial.
 Un policia detiene a un pibe y nosotros gritabamos defendiendolo y el policia mientras se iba caminando desaparecio en el aire y antes nos guiño un ojo. Yo no lo podia creer. Pero despues empece a descubrir que alla arriba todos hacian algo asi, desaparecian cuando querian con vueltas carnero y cosas por el estilo.

sábado, 5 de abril de 2014

la primer ala que nace

Esa mañana pude ver como se movian las cosas realmente. El acido estaba mas alla de la babosidad de mi lengua, mas alla de apenas rozar mis dientes con su ya blanda superficie geometrica, mas alla de mi garganta y la tibieza  permanente del interior de mi boca. Me habia atravesado los labios, la garganta, el triturado alimento del alma que venia masticando, la laringe, el pecho, se habia mezclado con mi sangre, y asi llego hasta cada una de las partes de mi cuerpo. Mis manos siempre a punto de temblar se saludaban para confirmar la existencia de la otra, tocaban sus dedos con el esplendor de quien ve por vez primera el mundo real, el verdadero mundo real. Se salvaban asi de una soledad inmensa, de una soledad que cuelga de un brazo, de cinco soledades que cuelgan de una mano. Asi salvaban su alma, de ser un grito que no fue, pues un alma es lo que es, no lo que no es.
Retumbó como el eco de un ala, de la primer ala que le nace a un cuerpo. Con la velocidad de los latidos cardiacos en su no poca libertad. Iba emplumando el mundo interior de mi materia. Preparando el vuelo.
Sentia como a traves de todas y cada capa de piel, de su profunda y pesada nube de olor, se movia cada uno de mis recuerdos, sin a penas darme cuenta que de ellos se trataba. Vi sin verlos como caian uno a uno al oceano siempre cambiante.
Entonces, pude observar.
La lampara de yeso pegada al techo era una flor blanco amarillenta. No era una flor blanco amarillenta. De repente fui testigo del movimiento, latente como alguien que no esta muerta. Como quien esta viva. Era otra flor, sus petalos cambiaban gradualmente, crecian para un lado, se bajaban de otro, el color iba haciendose mas puro, o mas frio, tomaban otra forma a cada plegarse o desdoblarse. No era una flor, eran todas las flores. Yo lo pude ver. El techo era el agua tranquila de un mar, que se mueve demasiado, pero que al percibirlo en su contraste de olas salvajes asociamos la idea de un mar calmo a lo que aun se mueve con pasion desmesurada. El techo era el mar, el techo escondia los secretos de lo mas intimo del planeta. La flor flotaba sobre el mar. El mar se movia como la flor. La flor, la flor era tambien mi sangre. El mar, el mar era tambien mi amor. Mi ser.
La alfombra sobre el aire. Mis alas crecian.
El tiempo, recuperado de su enfermedad, levó tambien hacia su naturalidad.
¿mas mascaras? ¿De qué protejernos? ¿qué simular?
Al tiempo tambien lo atravesó la vida, y nosotros tan ingenuos, pretendiendo ser sus seguidores por la cobardia inutil de no buscarnos. De no atrevernos a encontrarnos. ¿De que vale esa creencia que se basa en no ser uno mismo? ¿cuantos templos podria dedicarsele al tiempo con la debilidad del miedo que nos lleva a destruir la posibilidad? ¡la existencia! el alma! el ser! el ala! el vuelo! el vuelo!
¿Por que/para que beneficiar ese caparazon con el disimulo?
El tiempo sano de todo rostro ajeno, tambien se movia como una flor, se despedazaba para volver a formarse, a penas veia azul, ya era magenta, a penas decia amarillo, ya vivia en furia divina el cyan. Las cosas no podian detenerse dentro mio. Las cosas no se detuvieron fuera de mi.
Me movia con ellas.
Ellas conmigo.
No tuve miedo. Me conocí, me enamore. No me pude volver a detestar, aunque tanto me habia detestado, humillado, censurado. Alguna vez tuve pánico. Y eso no es nada tierno para un espíritu: Rechazar las estrellas que vinieron a bailarnos.
 Estaba muerta, hecha del mas ruin plastico quemado. Lo recuerdo por que tal vez no hubiera podido engendrar alas. Tenia tanto miedo que evite cualquier tipo de contacto con lo que refleja el alma, esos espejos del espacio que te cruzas en cualquier calle. El otro. lo otro. la otredad. Iba distrayendome de los sueños, tambien avisos de la esencia que se manifiesta en todas sus formas, en todo sonido o color, en toda textura, en toda dimension, en todo cauce, en todo desierto. Me comi las manos. Me comi el corazon. Lo mas ondo del dolor me iba haciendo desaparecer. Me iba cubriendo de lo otro. Nombres, frases, calles, mapas, documentos. Era el comienzo de un monstruo. La monstruosidad sin compacion iba formando en mi una escuela de la atrociedad del ser. Y alli sus alumnos, mis palabras, y mis habitos, iban convirtiendose en una cosecha interminable de simulacros. ¿como iba a parar? Iban a ser mis ojos, pero mi piel toda otra. Y lo mas grave era que si me atravesaba las pupilas y lograba encontrar con sus enorme fealdad, mi alma, yo estaba perdida. Completamente deshecha. ¿podia ser posible? Tal vez el mismo miedo me hacia ver el alma como un juego que se puede iluminar para siempre de una luz artificial. Pero el echo de que esa mañana las cosas se movieran fueron mis alas desplegandose. A la luz artificial se la rompe con el palazo de un alma fuerte. Eso descubri. Eso vi. Eso no pudo no atravesarme para siempre.
Un orgasmo eterno.


(una de las mejores pepas de mi vida)