miércoles, 18 de diciembre de 2013
mirà que soy una tonta una tarada la mas descerebrada y la menos constante con todo.
No tengo disciplina con la facultad.
No puedo trabajar mas de dos o tres días a la semana.
Soy una larva.
Un bicho sucio que se contagia tiña de su gato encontrado
en la calle por que es una gila y duerme con el gatito
en el cuello o en la cabeza. Soy como algo parecido a una ameba.
Por ahí viene mi existencia.
Estoy acá, siento latirme,
siento morirme, siento una carcajada del
viento que me escupe en la cara una piña
del infierno del pensamiento de una porción de tierra seca.
No me importan mis rollitos.
Nunca me importo cuando era chica no verme los pies por la panza.
Soy un mamarracho, no tengo sentido del buen gusto,
no se lo que es combinar la ropa. Me duele la
cabeza si voy a una peluquería y me hacen un corte.
Soy una rata. Prefiero escabiar en la calle
hasta estar media en pedo y después entrar a una fiesta.
Soy despreciable. Meo en cualquier calle,
entre cualquier auto, en cualquier plaza.
No me interesa, soy una sucia. Un marimacho. Una torta.
Una puta.
Una discapaz en relaciones de amor.
ninfómana y asexual al mismo tiempo.
Una
claustrofóbica
de las rejas que te quieren meter las personas con sus "reglas para estar cerca mio".
Dejo todo tirado. Mi pieza tiene olor raro.
¿Soy un humano? Me gusta jugar con barro,
no me importa manchar la ropa.
Me gusta hacerle dibujos a mis zapatillas aunque no sean perfectos y
aunque me las hayan regalado y estaban blanquitas.
No me interesa nada.
La guitarra fue la mejor y
verdadera compañera que jamas me abandonó.
Ni se resintió conmigo. Soy cualquiera por querer tomar una
casa.
No quiero darle mi tiempo a una empresa del orto.
No quiero que se me vaya ese tiempo en pagar
un alquiler del culo.
Prefiero irme de viaje seis meses a perderme en cualquier ciudad y en cualquier
bosque. Me chupa ovarios si no tengo un peso,
siempre hay gente que te ayuda, siempre hay algo que intercambiar.
No me interesa pelar un par de cebollas por una bolsa gigante de verduras.
No me interesa ser camarera,
heladera, vendedora de pan relleno, putita.
Me gusta escribir estas cosas malisimas.
Y tengo un hueco en la cabeza
de donde sale una enfermedad,
un virus, La torpeza de mi vida que me dice,
que me cuenta que tengo todas
esas cosas horribles pero que
lo mas feo
del mundo
y de la tierra de mi corazón
es mi problema mental;
VOS.
